Venia viajando por no se que cantidad de vez en el colectivo en el día de la fecha, y me acorde de "carne es crimen", famosa frase de los señores straight edge y ahí pensaba...
Como en un país, por no decir en un mundo, donde hay gente que muere de hambre y daria lo que fuera por tener comida, gente con recursos para tener un buen plato en la mesa, de algo tan nutritivo como la carne, reniega de ella por los "sentimientos" de los animales.
No justifico la tortura de los animales ni de ningun ser vivo, lo cual incluye las plantas, pero si uno necesita carne para vivir, no es malo alimentarse de un animal, es lógico, es el fucking ciclo de la vida.
Pero que hipocritas cara rotas, haciendo esos planteos en este país, pateticos, promulgando que la gente no coma carne, cuando hay gente que no tiene carne en los huesos siquiera.
Egoistas, inconcientes, pateticos.
El comienzo de las estaciones Japonesas…
Hace 3 años
2 comentarios:
Ey, no conocía este blog, recién lo veo en tus links, y me encuentro con este texto...
Coincido totalmente, la verdad que no entiendo, pero ni un poco, los maniáticos "anti carne". Menos que menos cuando, encima, nos juzgan de asesinos a los que sí nos alimentamos de carne...Como si ellos fuesen a cambiar el mundo, o siquiera a contribuir en algo, manifestandose por el derecho a vivir de los animales...Cuando es mucho más importante manifestarse por el derecho a vivir de nuestros pares humanos que sufren.
Lo llamativo del asunto es que escuché decir muchas veces a unas cuantas personas lo "injusto" que es para los caballos de los carritos cirujas (en Capital no se ven muchos, pero en Santa Fe sí) que los usen para eso. ¡Como si fuese justo que una persona tenga que juntar basura subida a un caballo! ¡Como si esa persona realmente quisiera estar en esa situación! Entiendo que el caballito sufre, pero...arriba de él sufre también una familia entera.
En fin, copado blog.
Ah, y otra cosa. Creo que son dignas de una puteada muy contundente y especial las personas que tienen recursos como para acceder a una buena alimentación, pero eligen vomitarla o rechazarla, y, además, hacen de eso un orgullo y un supuesto estilo de vida, haciendo gala de eso que en realidad es una enfermedad que las puede llevar a la muerte. Se apoyan mutuamente, con lo cual, no sólo se destruyen a sí mismas sino que alientan a demás personas a hacerlo.
En esas personas, me recontra cago, lisa y llanamente.
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